Errores comunes al formular dermocosmética y cómo evitarlos

La formulación dermocosmética requiere precisión, conocimiento de los ingredientes y un manejo cuidadoso de las técnicas. Sin embargo, es frecuente que quienes empiezan a formular cometan errores que afectan la eficacia, estabilidad o seguridad del producto final.

En este artículo repasamos los errores más comunes en dermocosmética y cómo evitarlos para lograr fórmulas seguras y efectivas.

1. Usar concentraciones inadecuadas

• Error: pensar que más cantidad de activo significa más efectividad.

• Consecuencia: irritación, inestabilidad o pérdida de eficacia.

• Solución: usar las concentraciones recomendadas y respaldadas por evidencia científica.

2. No verificar compatibilidades entre activos

• Error: mezclar ingredientes que se inactivan entre sí (ejemplo: vitamina C pura con niacinamida en ciertas condiciones de pH).

• Consecuencia: el producto pierde efectividad.

• Solución: consultar tablas de compatibilidad y ajustar el pH de la fórmula.

3. Elegir vehículos inadecuados

• Error: usar cremas muy grasas para pieles oleosas o geles muy fluidos en piel seca.

• Consecuencia: rechazo del producto por parte del usuario.

• Solución: adaptar el vehículo según el tipo de piel y la acción del activo.

4. Ignorar los conservantes

• Error: pensar que “natural” es sinónimo de seguro y omitir el conservante.

• Consecuencia: contaminación microbiológica y riesgo para la salud del usuario.

• Solución: elegir conservantes seguros, aprobados y en la concentración correcta.

5. No controlar parámetros fisicoquímicos

• Error: no medir el pH, viscosidad o estabilidad de la fórmula.

• Consecuencia: desestabilización del producto, separación de fases o pérdida de eficacia.

• Solución: implementar controles de calidad básicos en cada formulación.

6. Etiquetado incompleto

• Error: no incluir información esencial como fecha de elaboración, vencimiento, condiciones de almacenamiento o advertencias.

• Consecuencia: desconfianza del usuario y riesgos de uso incorrecto.

• Solución: aplicar normas de rotulado profesional.

Evitar estos errores comunes en dermocosmética es fundamental para garantizar productos seguros, estables y eficaces. La clave está en la formación profesional y en la aplicación rigurosa de buenas prácticas.

👉 Si querés aprender a formular paso a paso y evitar estos errores desde el inicio, conocé nuestro Curso Online de Dermocosmética.